"El secreto de sus ojos".

El 16 de septiembre de 1973, cuando tenía doce años, la televisión era en blanco y negro.

Mientras jugaba al futbol y festejaba los goles con abrazos llenos de alegría y compañerismo que culminaban la persecución paroxística de quien lo había metido, en el otro lado del mundo, en Chile, en el sótano de un estadio de fútbol, varios militares y un policía dispararon cuarenta tiros contra un hombre indefenso que contestaba en silencio, con su mirada y los puños cerrados, a sus insultos. Los sacó de quicio.

Él era poeta y cantante. Su guitarra quería ser la banda sonora y la voz de un pueblo ilusionado que miraba a un tipo con gafas, bigote y gabardina que era médico y prometía ser un gobernante justo. Nacionalizó las minas de cobre que eran propiedad de la empresa Anaconda Copper Mining Company, propiedad de Rockefeler y Rothschild.

Ellos eran militares y policías obedientes. Seguían las órdenes de sus superiores.Y sus superiores seguían las órdenes de sus más superiores.

Los super-superiores que daban las órdenes actuaban para defender su territorio. Temían que ese tipo con gafas y gabardina, que prometía que sería un gobernante justo, pudiera dar puerto de llegada a los enemigos. Sabían que había pedido dinero a traves de un oficial del KGB llamado Sviatoslav Kuznetsov para las elecciones.

-Los super-superiores eran el gobierno de los EEUU, Nixon y Kisinger, al servicio de Rckefeller y Rothschild.

(...)
         -Su territorio era el Continente Americano. 

         (...)
                   -El tipo de gafas y gabardina se llamaba Salvador Allende.

                   (...)
                                 -El enemigo era la Union Soviética.

                                  (...)

Hector Herrera Olguín, funcionario del Registro Civil vio su cadaver, lo reconoció y le dio la noticia a su esposa, Joan Turner Robert que le pudo dar el útimo abrazo,  a escondidas.

José Paredes era conscripto (recluta) y vio cómo le golpearon y después le acribillaron a balazos. No ha dormido bien desde aquel día.

Pedro Pablo Barrientos Núñez, vende coches y es un buen vecino de una localidad del estado de Florida, en EEUU. Dice que no sabe nada, pero José Paredes le identifica como el que primero disparó.

Jorge Smith, Edwin Dimter Bianchi (apodado "El Principe" por su bonita voz), Nelson Hasse, Luis Bethke , Roberto Souper Onfray y Raúl Jofre González, también dicen que no saben nada y han sido identificados como los otros que dispararon contra el cuerpo de Victor Jara.

Tras derrocar el gobierno de Allende, el nuevo gobierno del General Pinochet tenía que reprimir duramente a sus partidarios y compensar los daños a Anaconda Copper, que recibió por los perjuicios de la nacionalizacion 250 mil millones de dolares del nuevo gobierno chileno.

El Juez chileno Miguel Vazquez, el pasado 3 de enero de 2013 ha ordenado la detención de todos ellos. De los militares quiero decir, no de Nixon, Rockefeller y Rothschild, fallecidos, ni de Kissinger, a muy mayor...

Asi que, mientras Victor Jara le canta "Te recuerdo Amanda" a Pablo Neruda 

ante la mirada incrédula de Joaquín Murieta, 

aquí, en el mundo real,

comienza un proceso judicial

para aclarar lo ocurrido.