viernes, junio 09, 2006

El laberinto vasco.


Alrededor de la interpretación de lo que viene ocurriendo en el País Vasco, ha tenido lugar una interesante polémica entre Antonio Escohotado y el que fuera su alumno Fernando Savater. Dos puntos esenciales separan sus discursos. Para Savater el sentimiento nacionalista es intrínsecamente nocivo y genera posiciones políticas radicales y fascistas, mientras que Escohotado no acepta esa descalificación general y apunta la posibilidad de encontrar elementos positivos en esa manía de los hombres de agruparse por territorios que además, ha sido un fenómeno universal. El segundo punto de desacuerdo se refiere a la vía de salida en el laberinto vasco. Mientras Escohotado defiende que todo problema político encuentra soluciones con dos medicamentos que identifica como "dialogo" y "consulta", Savater cree que frente a quien empuña una pistola con la que te apunta no hay nada que hablar y toda consulta esta viciada por la coacción mafiosa de los pistoleros. Por eso para Savater la salida debe consistir en que quien tiene el arma la entregue o que la policía se la quite y lo encarcele.
Ambos análisis son el fundamento de las posiciones políticas de nuestros dos grandes partidos políticos. Para uno de ellos el final debe ser la detención del último terrorista o su entrega. Para el otro es posible imaginar un final aplicando la receta Escohotado: " dialogo y consulta".

La idea de éste post es ahondar en el análisis de ésta segunda propuesta de solución. Si aceptamos imaginarnos cuáles serían los siguientes pasos, aparecen nemerosas opciones previas que afectan al resultado final. Porque ¿con quién hablar? ¿ a quién consultar? ¿Cuál sería el cuerpo electoral, los tres territorios que componen en Pais Vasco o los siete de ese imaginario denominado Euskalerria?¿debe participar en el diálogo el Estado Frances? ¿cómo sería el computo, se exige una mayoría en cada uno o en el computo total? ¿qué hacer con aquellos territorios que tuvieran un resultado distinto al total? Sin duda pueden aparecer muchas más interrogantes.
En éste punto se me ocurre pensar: si en los tres territorios vascos la situación entre voto nacionalista y no nacionalista es reiteradamente de empate técnico en la sucesivas consultas electrorales ( admitiendo la presunción de que todo nacionalista sea independentista ), parece razonable pensar que si añaden los territorios franceses y Navarra la balanza se inclinaría claramente a favor de la opción no nacionalista. En ese caso al final de la consulta resultaría que no habría cambio de estatus político.
Desconfianza:las iniciales opciones y la organización de la consulta permite tantos desacuerdos, que en el viciado ambiente que respira tras lustros de muertos y ambigüedades, el muy probable que ambas partes tuvieran a su disposición distintos argumentos o razones para deslegitimar una consulta de resultado adverso y no pudieran resistir la tentación de utilizarlos.
Parece pues que tampoco ésta solución Escohotado ofrece un horizonte demasiado optimista.
Como en los procesos neuróticos, la cuestión vasca se introduce en numerosas ocasiones en circulos viciosos que conectan la aparente salida con el principio en un contínuo bucle sin final que recuerda la vieja cantinela infantil: "¿quieres que te cuente un cuento recuento, de sal y pimiento, que nunca se acaba y ya se acabó? Que no te he dicho ni que si ni que no, que lo que te digo es si quieres que te cuente...".

Como en los procesos neuróticos lo mejor es descansar, buena alimentación y para encontrar la salida, pensar en otra cosa.

Etiquetas:

Cingular Cell Phones
T-Mobile
Locations of visitors to this page Page copy protected against web site content infringement by Copyscape
Free Guestmap from Bravenet.com Free Guestmap from Bravenet.com
<>
Segui @jmcaleroma